Este es un melón que recolectamos al final de la pasada campaña 2009. Habitualmente todos los años dejo alguno en mi cochera (sótano) de Cartagena para observarlo. Como véis, en una de las vistas del mismo presenta las típicas manchas irregulares pardas en la corteza. Y aunque no lo podéis ver está blando por dentro (y tiene una marca de mis dedazos). Sin embargo, como no ha tenido problemas en sus extremos peduncular y estilar, ni golpes, ni tenía reticulado demasiado profundo y denso, el fruto externamente presenta un aspecto bueno. Este fruto pertenece a una NIL que estudiamos por primera vez en 2004 y que parece manifestar una vida comercial interesante. Es decir, puede tener algún QTL de interés para este carácter.
Las manchas pardas pueden eliminarse mediante algún compuesto que reduzca la deshidratación, posiblemente combinado con algún antioxidante. Todo ello sin que se dificulte en exceso el intercambio de otros gases ya que ello podría producir anaerobiosis en el interior del fruto y por tanto fermentación y sabores extraños.
